Un terremoto de 7,7 grados sacudió, durante 40 segundos, 2.000 kilómetros del territorio chileno, especialmente en el norte, dejando una veintena de heridos leves y ninguna víctima, según informes oficiales y del Departamento de Sismología de la Universidad de Chile.
“Estamos frente a un sismo de 7,8 grados de intensidad en la escala de Richter”, informó la directora de Onemi, Carmen Fernández. Agregó que el epicentro estaría a unos 60 kilómetros de profundidad en la pequeña localidad de Quillagua, a unos 1.650 kilómetros al norte de esta capital.
El fuerte temblor se produjo a las 12.43 hora local (15.43 GMT) y afectó con distinta intensidad desde el extremo norte, en la ciudad de Arica, hasta esta capital, más de 2.000 kilómetros de largo.
El vocero oficial de gobierno, Ricardo Lagos Weber, señaló que los antecedentes preliminares “hasta ahora no hay reportes de víctimas”.
En Arica, en la frontera con Perú, los colegios fueron evacuados, de acuerdo a un plan contemplado para situaciones de emergencia.
En Iquique y Antofagasta la intensidad fue estimada en 6 grados. El aeropuerto de Antofagasta sufrió algunos destrozos en la pista. También se informó de derrumbes en Iquique y cortes en la carretera.
Una corniza del Hotel Antofagasta se derrumbó y aplastó dos automóviles desocupados, según imágenes de la televisión estatal. En Calama, al interior de Antofagasta, se interrumpió la energía eléctrica.
La encargada de relaciones públicas del hotel Park, Andrea Rivero, dijo telefónicamente a la AP que el sismo “fue asquerosamente fuerte”, muy largo y que “hubo mucho ruido subterráneo”.
Lagos Weber descartó también que el sismo pudiera producir un tsunami por haberse registrado en el continente y a unos 60 kilómetros de profundidad.
El sismo fue sentido intensamente en poblaciones del sureste del Perú como Arequipa y Tacna, donde medios locales reportaron que decenas de personas de esas dos localidades salieron de sus casas y oficinas atemorizados por el fuerte movimiento, y permanecieron en plazas y calles por varios minutos.
No se reportaron daños o heridos en Perú por el sismo.
“Estamos frente a un sismo de 7,8 grados de intensidad en la escala de Richter”, informó la directora de Onemi, Carmen Fernández. Agregó que el epicentro estaría a unos 60 kilómetros de profundidad en la pequeña localidad de Quillagua, a unos 1.650 kilómetros al norte de esta capital.
El fuerte temblor se produjo a las 12.43 hora local (15.43 GMT) y afectó con distinta intensidad desde el extremo norte, en la ciudad de Arica, hasta esta capital, más de 2.000 kilómetros de largo.
El vocero oficial de gobierno, Ricardo Lagos Weber, señaló que los antecedentes preliminares “hasta ahora no hay reportes de víctimas”.
En Arica, en la frontera con Perú, los colegios fueron evacuados, de acuerdo a un plan contemplado para situaciones de emergencia.
En Iquique y Antofagasta la intensidad fue estimada en 6 grados. El aeropuerto de Antofagasta sufrió algunos destrozos en la pista. También se informó de derrumbes en Iquique y cortes en la carretera.
Una corniza del Hotel Antofagasta se derrumbó y aplastó dos automóviles desocupados, según imágenes de la televisión estatal. En Calama, al interior de Antofagasta, se interrumpió la energía eléctrica.
La encargada de relaciones públicas del hotel Park, Andrea Rivero, dijo telefónicamente a la AP que el sismo “fue asquerosamente fuerte”, muy largo y que “hubo mucho ruido subterráneo”.
Lagos Weber descartó también que el sismo pudiera producir un tsunami por haberse registrado en el continente y a unos 60 kilómetros de profundidad.
El sismo fue sentido intensamente en poblaciones del sureste del Perú como Arequipa y Tacna, donde medios locales reportaron que decenas de personas de esas dos localidades salieron de sus casas y oficinas atemorizados por el fuerte movimiento, y permanecieron en plazas y calles por varios minutos.
No se reportaron daños o heridos en Perú por el sismo.