BOGOTÁ (AFP) — El presidente colombiano, Álvaro Uribe, puso el lunes un límite a la mediación de su homólogo venezolano Hugo Chávez, para un canje de rehenes de la guerrilla de las FARC por rebeldes presos, en momentos en que éste llegó a París a tratar el tema con el mandatario Nicolas Sarkozy.
El próximo mes de diciembre es el límite fijado por Uribe para las gestiones de Chávez, cuya mediación fue avalada por el mandatario colombiano el 31 de agosto pasado durante una visita a Bogotá del gobernante venezolano.
Bogotá reaccionó así a declaraciones de Chávez en París, en las que reveló que durante la Cumbre Iberoamericana de Santiago de Chile, Uribe autorizó un encuentro "con condiciones" entre el presidente venezolano y el máximo líder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Manuel Marulanda.
Chávez llegó a París la noche del lunes para entrevistarse este martes con Sarkozy, quien se ha fijado la liberación de la colombo-francesa Ingrid Betancourt --una de las rehenes de la guerrilla-- una prioridad de su gobierno.
Betancourt, secuestrada por las FARC en febrero de 2002; los estadounidenses Keith Stansell, Thomas Howes y Marc Gonsalves plagiados en febrero de 2003; y varios políticos, militares y soldados conforman un grupo de 45 secuestrados que la guerrilla propone canjear por 500 rebeldes presos.
El gobierno colombiano, en un comunicado emitido la noche del lunes y en el que puso plazo a la mediación de Chávez, se quejó por la infidencia de éste respecto a la autorización que Uribe le dió para que se reuniera con Marulanda. Bogotá señaló que ese tema fue "para ser manejado en secreto como herramienta de negociación".
Respecto a ese eventual encuentro, el gobierno colombiano reveló en su declaración que autorizó la cita "siempre y cuando se hubiesen liberado previamente todos los secuestrados en poder de las FARC y la reunión fuera en el marco de un proceso de paz exitoso".
Además, Uribe se declaró dispuesto a acudir también a ese encuentro con el histórico líder de las rebeldes FARC, según el comunicado oficial.
El texto agrega que el mandatario colombiano le dijo a Chávez que "podía explicarle a las FARC que con el presidente Uribe se puede negociar un proceso de paz".
Las FARC se comprometieron a enviarle a Chávez pruebas de supervivencia de los secuestrados, especialmente de Betancourt y de los tres estadounidenses.
El mandatario venezolano esperaba llegar a París portando una prueba de vida de Betancourt y entregársela a su homólogo francés Sarkosy, en una cita que entre los familiares de los rehenes ha despertado gran expectactiva y esperanza.
Las FARC es la guerrilla más antigua y militarmente poderosa de las que combaten en Colombia, con un estimado de unos 17.000 combatientes, y contra la cual Uribe ha enfocado principalmente su política de lucha contra los grupos armados ilegales del país.